Leandro ‘Tati’ Mercado
información para la prensa
Campionato Italiano Velocità, Superstock 1000
2do. Round, Monza, Carrera
‘TATI’ MERCADO CON SABOR AGRIDULCE
“Una de las mejores carreras de los últimos tiempos del CIV”, comienza diciendo el Informe del propio Campionato Italiano Velocità sobre la carrera de la categoría Superstock 1000 disputada en Monza, “ocho pilotos, cuatro BMW, tres Kawasaki y una Ducati, se jugaron por la victoria, a lo largo de diez vueltas, dando un espectáculo que entusiasmó a un público numeroso”.
Uno de esos ocho pilotos era el argentino Leandro ‘Tati’ Mercado, con la Kawasaki Ninja ZX-10R Nº 36, del equipo de Lucio Pedercini (“el tercer alfil de Pedercini”, tal como lo valoriza el Informe del CIV) que largando desde la octava posición, sorprendió por su vertiginoso accionar inicial, alcanzando la segunda colocación antes de que terminara la primera vuelta y debiendo soportar el asedio de dos BMW y una Ducati, que con mayor aceleración y velocidad de punta, lo fueron corriendo hacia el tercer, cuarto y quinto puesto, posiciones relativas, porque la batalla apretada que había entre ellos era infernal, al punto que en la séptima vuelta (de un total de diez), ‘Tati’ Mercado estaba quinto a 0.349 de Sylvain Barrier (BMW), que en ese momento oficiaba de puntero.
“Fue una carrera increíble porque la Kawasaki respondió muy bien en la largada, y lo más importante es que nos pudimos mantener en el pelotón de punta, donde reinan las BMW y las Ducati”, comentó el piloto cordobés.
Al respecto, Mercado señala que las BMW y las Ducati se benefician, además de estar ya desarrolladas, por una caja negra que es abierta, a diferencia del mismo dispositivo de las Kawasaki, sobre la cual sólo pueden trabajar los técnicos de fábrica. “Son las dificultades propias del desarrollo y en esto estamos aprendiendo y creciendo en cada carrera”.
En la octava y novena vuelta, ‘Tati’ fue superado por su compañero de equipo Bryan Staring, quien había hecho una labor más cautelosa, mientras que la ZX-10R de Mercado, evidenciaba el desgaste de la lucha de las primeras vueltas, que se manifestaba en los neumáticos y en un problema en la sexta marcha. “Tiene que ver con el trabajo en la electrónica, donde tenemos que revisar el funcionamiento del cambio eléctrico”, especificó Mercado.
Sin embargo, ‘Tati’ Mercado no aflojó sino que siguió empujando, para no resignar más puestos. En el comienzo de la décima y última vuelta, “Llegué con mucha velocidad -acrecentada por la recta principal de Monza- a la primera chicana, estaba muy pasado y por esquivar a Staring, para no chocarlo de atrás, corrí la moto y toqué con la rueda delantera la punta del ‘pianito’ y me caí”, cuenta Mercado, con una mezcla de entusiasmo y desilusión, “fue un error mío. No me conformaba con la posición”. Sin duda, que era una carrera que se merecía otro resultado. “Cuando largué y vi como estábamos ubicados, me ilusioné con un podio”, confiesa el argentino, transparente como siempre, cuando gana y cuando pierde.
En el box, lo recibió Lucio Pedercini, el dueño del equipo, quien antes de escucharlo le dijo: “En una semana tenés la revancha”, haciendo referencia al próximo compromiso por la Copa FIM del Superstock 1000, que se correrá en este circuito italiano en siete días más.
Más allá de la caída, el balance final es muy positivo. “Mucho antes de lo que creíamos, cuando todavía nos falta mucho para desarrollar la moto, una Kawasaki estuvo peleando con los líderes de la carrera”, analiza con serenidad Pedercini, con toda la experiencia de un ex piloto, “el 1’47.1 de ‘Tati’ en la sexta vuelta, lo mejor de él, estaba muy parejo con el resto de los de punta”.
La garra puesta por Mercado debe tener su correlato en el desarrollo técnico de la Ninja ZX-10R. Para eso trabaja el piloto argentino y el equipo, que hoy podría haber puesto tres motos entre los ocho primeros lugares, sobre un total de cuarenta participantes, ya que Bryan Staring arribó sexto y Marco Bussolotti séptimo. “Hay que seguir trabajando sobre el grip posterior”, dicen, tanto Pedercini como Mercado, sobre las asignaturas pendientes.
El ganador fue Lorenzo Zanetti (BMW), quien vino a correr como wild card al italiano, en preparación para la competencia de la semana que viene, cuando se haga presente en Monza el Mundial de SBK, el Supersport, la Copa FIM Superstock 1000 y el Superstock 600. La presencia de Zanetti como la de otros mundialistas prestigia y valoriza a la SS 1000 italiana, donde si bien uno es un campeonato italiano y el otro un europeo, el ritmo de competencia es extremo en uno y otro, acorde con un nivel internacional.